MUJERES VECINALES LA ALIANZA CONTRA LOS RECORTES EN LA LEY DE DEPENDENCIA

Desde muchos artículos venimos leyendo que los recortes de la crisis recaen especialmente sobre las clases trabajadoras, pero desde nuestro punto de vista no se concede la suficiente importancia al hecho de que recaen de forma muy específica sobre las mujeres, estén o no empleadas. Y si todos los recortes las afectan, lo hacen de forma muy especial los recortes de la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (conocida popularmente como Ley de Dependencia) por la situación de desigualdad real en que se encuentran las mujeres.
Y es que esta ley no sólo beneficia a las personas en situación de dependencia, de las que el 67% de quienes reciben prestaciones son mujeres, sino que según el INE en 2011 el 24,5% de las mujeres mayores de 65 años se encuentran en situación de vulnerabilidad ante la pobreza, por lo que ampliar el copago de los servicios residenciales y domiciliarios, y reducir las prestaciones económicas, como ha hecho el gobierno de Mariano Rajoy, condena aún más a la pobreza a las mujeres mayores, que tienen más necesidades de contar con apoyo para su cuidado.
Por otra parte, si tenemos en cuenta que en el sector de los servicios sociales el 85% de las personas que están en alta en Seguridad Social son mujeres, y esta Ley ha creado más de 185.000 puestos de trabajo directos y unos 65.000 indirectos, además, tenemos claro que el cuidado, hoy por hoy está en manos femeninas, y que el 92% de las personas cuidadoras con convenio especial en la Seguridad Social son mujeres; resulta evidente que la falta de financiación de la ley creará destrucción de empleo femenino.
También habría que destacar que las mujeres tienen mayor esperanza de vida y, por tanto, más riesgo de vivir en situación de dependencia más años; que tienen pensiones más bajas (la pensión media de jubilación de las mujeres es de 637 € mientras que la de los hombres es de 1.071 € y la pensión media de viudedad es de 596 €), y por lo tanto también menos recursos económicos; que las tareas del cuidado de hijos/as, personas mayores y personas con discapacidad, que siguen desempeñando de forma mayoritaria las mujeres en su entorno familiar, constituyen una limitación para su actividad profesional fuera del hogar.
En 2012 el Gobierno de Rajoy ha disminuido la aportación de la Ley de Dependencia en 283 millones de euros, mientras que en 2013 recortarán 200 millones; a las personas con dependencia moderada se les niega el derecho a acceder a ningún servicio o prestación económica hasta julio de 2015; un gran dependiente que hasta ahora recibía 520 euros mensuales, pasa a recibir 387 euros y además la cuidadora deja de tener la Seguridad Social a cargo del Estado. Las personas que disponen u opten por servicios de proximidad, verán reducidas el total de horas de servicio de ayuda a domicilio a que tenían derecho (hasta 20 horas). No habrá ningún tipo de financiación para pagar el transporte para el traslado entre el domicilio y los centros de día y de noche. Se incompatibilizan los servicios de Ayuda a Domicilio y Centro de Día, cuando en realidad se complementan y en los dos casos se ha incrementado el copago al endurecer los criterios para determinar la capacidad económica de los usuarios y ampliar el máximo a pagar, que pasa del 65% al 90% del coste del servicio.
Con estos recortes las mujeres retroceden en bienestar social, ayudas, derechos y por tanto en libertad, nos tememos que aprovechando la coyuntura económica se materialicen retrocesos en igualdad que responden a una enraizada ideología patriarcal, que sigue manteniendo que las mujeres no pueden ser iguales a los hombres.

Manifiesto de mujeres vecinales "LA ALIANZA"


El alarmante aumento de mujeres asesinadas por sus parejas este año ha disparado la preocupación del Ministerio de Igualdad por el auge de ciertos colectivos con ideas machistas que, en opinión del delegado del Gobierno contra la violencia sexista, Miguel Lorente, tergiversan las estadísticas sobre el maltrato o los conflictos en las separaciones.

“Con el fin de que todo siga igual y los hombres sigan teniendo privilegios”.
El dirigente ministerial denomina posmachistas a estos grupos porque su origen entronca con la posmodernidad y presumen de su rechazo al machismo. «Los posmachistas se han dado cuenta de que la crítica a los avances de las mujeres no basta y por eso dicen que buscan la igualdad»,

En particular, la dependencia económica de las mujeres, que ha perdido terreno pero sigue presente en muchas familias, y que implica, asimismo, un sometimiento de la voluntad, que es impuesta por el varón y cuya vulneración por parte de la mujer puede conducir a episodios de agresión física y psicológica, o incluso al asesinato.


De hecho, el popularmente denominado machismo vendría a ser el traje efectivo de dicha situación, y todo ello constituye un conjunto de creencias que, como se pone de manifiesto regularmente, sigue arraigado en las sociedades, incluso en las más avanzadas.


Por todo ello, la violencia de género supone una cuestión más amplia que la circunscrita a la legislación, aunque no cabe duda de que las leyes proporcionen una primera barrera contra su impunidad y extensión. La tarea desborda a las fuerzas de seguridad y a los propios Juzgados, y también deja perplejos a los ciudadanos, que comprueban cómo se producen regularmente casos tan dramáticos como los recientemente acaecidos en España, en el que en algunos de ellos no existían ni denuncia previa por malos tratos ni se sabía de disputas serias entre las parejas. Es necesaria, en consecuencia, una acción social liderada por las instituciones públicas para que las ideas y creencias que sirven de base a esta violencia sean modificadas en pos de una comprensión más racional de la convivencia entre las personas.




MUJERES VECINALES “LA ALIANZA” Y ÁREA DE MUJER DE LA FLAVE